Cómo quitar el óxido de puertas y ventanas sin pintarlas: 4 consejos infalibles

La lluvia introduce problemas de humedad en casa y también puede levantar la pintura y provocar la aparición de manchas de óxido en las superficies metálicas, sobre todo en las ventanas y puertas exteriores.

El óxido es una reacción que se produce cuando el hierro de los metales entra en contacto con el oxígeno y el agua, provocando la corrosión de las superficies. En este artículo, le ofrecemos 4 consejos para eliminar el óxido de ventanas y puertas.

El óxido no es sólo un problema estético, también puede debilitar los objetos haciendo que funcionen peor. En el caso de puertas y ventanas, si no se soluciona a tiempo, el problema del óxido puede repercutir negativamente en el funcionamiento de estos objetos.

1. Elimine el óxido con papel de aluminio

Por extraño que parezca, este método es uno de los más eficaces contra el óxido.

Corta trozos de papel de aluminio y forma pequeñas bolas de unos 3 centímetros de diámetro, luego sumérgelas en agua durante 1 minuto. Frota las bolas sobre las partes metálicas oxidadas y verás cómo quedan como nuevas.

2. Elimina el óxido con limón

La acidez del limón es perfecta para eliminar el óxido de los objetos metálicos. Vierte un poco de zumo de limón en un bol, añade media cucharada de sal y mezcla.

Aplícalo sobre las zonas oxidadas y déjalo actuar unas horas, después frota con un cepillo de dientes.

3. Elimina el óxido del metal con Coca Cola

No se trata sólo de una bebida refrescante: la Coca Cola y bebidas similares están entre los mejores aliados para eliminar el óxido del metal.

Vierte la bebida sobre las zonas oxidadas y déjala actuar unos minutos, después frota con una lija fina para eliminar el óxido.

4. Elimina el óxido del metal con bicarbonato de sodio

Vierte 4 cucharadas de bicarbonato de sodio en un recipiente limpio y añade 100 ml de agua. Aplica la solución sobre las superficies oxidadas y déjala actuar durante 5 minutos.

Por último, frota con un cepillo de dientes para eliminar el óxido y, a continuación, pasa un paño limpio.

Ahora que ya sabes cómo quitar el óxido de puertas y ventanas, aplica inmediatamente los métodos anteriores para dejarlas como nuevas otra vez.