De todos los trabajos de limpieza que hay que hacer en la cocina, la limpieza del horno puede ser un verdadero reto, sobre todo cuando se trata de eliminar manchas difíciles de grasa quemada.
Sin embargo, un horno limpio es la base fundamental de una cocina sana, y también es importante mantener el aparato en buen estado de funcionamiento a lo largo del tiempo.
Hoy te voy a contar todos los ingredientes que seguramente tienes en casa y que te ayudarán a eliminar las manchas de grasa del horno sin cansarte.
N.B. Antes de utilizar cualquier remedio, calienta el horno durante 15 minutos a 180 grados, para que el calor ayude a fundir las manchas. Después apaga el horno, espera a que se caliente y ponte guantes para limpiarlo.
Vinagre
El primer remedio que veremos juntos es el vinagre, un producto especialmente eficaz para eliminar las manchas de grasa quemada del horno sin demasiado esfuerzo.
Su acidez actúa como desengrasante natural, disolviendo las incrustaciones más difíciles y facilitando su eliminación.
Para utilizarlo, llene una botella pulverizadora con vinagre de vino o vinagre de sidra de manzana (que tiene un olor más suave). Pulveriza la solución sobre la mancha y déjala actuar unos minutos antes de frotar con una esponja o paño; luego aclara bien.
El vinagre no sólo limpia, también elimina los malos olores.
Bicarbonato sódico
El bicarbonato de sodio es sin duda uno de los aliados más poderosos para limpiar las manchas de grasa quemada en el horno.
Gracias a su acción abrasiva, podrás decir adiós a esas manchas negras incrustadas que ya no te permiten cocinar con total tranquilidad.
Prepara una pasta mezclando 2 cucharadas de bicarbonato sódico con agua corriente, aplícala sobre la mancha y déjala actuar durante al menos 15 ó 20 minutos.
Esto disolverá la grasa quemada y facilitará su eliminación sin dañar la superficie del horno.
Pasados al menos 30 minutos, coge una esponja no abrasiva y frota suavemente hasta que la suciedad desaparezca para siempre.
Zumo de limón
Y ahora, ¡el cítrico más famoso del mundo!
El zumo de limón es muy útil no sólo en la cocina, sino también para limpiar superficies difíciles, como las del horno, donde se acumula la grasa quemada.
Basta con exprimir un limón sobre la zona afectada y frotar con la cáscara o con una esponja ligeramente abrasiva.
Para que la mancha desaparezca inmediatamente, es importante dejar actuar la mezcla durante al menos 30 minutos.
Una vez aclarado, el horno no sólo estará limpio, sino que además desprenderá un aroma embriagadoramente fresco.
Ácido cítrico
El ácido cítrico, como sabes, es un potente desincrustante que puede ser eficaz para eliminar las manchas de grasa quemada de tu horno en un tiempo récord.
Utilizar ácido cítrico es muy sencillo: basta con preparar una solución con 150 gramos del producto disueltos en 1 litro de agua. Vierte la mezcla en una vaporera y pulveriza una cantidad generosa sobre la mancha.
Deja que actúe durante media hora, luego pasa una esponja y la suciedad desaparecerá para siempre.
Si es necesario, repite la operación y tu horno quedará como nuevo.
Jabón amarillo
El último truco que vamos a ver juntos es ¡el jabón amarillo!
Este producto natural con mil propiedades no deja de sorprender a la hora de eliminar la suciedad incrustada.
Para utilizarlo, basta con coger una bolita de jabón, extenderla sobre una esponja que no sea demasiado abrasiva y frotar la mancha de grasa con agua tibia.
A continuación, aclara bien con agua para eliminar todos los restos, ¡y verás cómo no queda ni el más mínimo rastro de suciedad!
No cometas errores
Los remedios que acabamos de describir son realmente sencillos, pero para que no te saltes ni un solo paso, te explico cómo en este vídeo dedicado :