¿Cómo preparar el mosquero más eficaz?

Las moscas pueden ser un problema molesto, sobre todo cuando hace calor. Si buscas una forma barata, ecológica y eficaz de librarte de estos indeseables insectos, puedes fabricar una trampa para moscas muy eficaz con materiales que probablemente ya tengas en casa.

En este artículo te explicamos cómo hacer una con una simple botella de plástico cortada por la mitad y una atractiva mezcla de azúcar y vinagre.

Necesitarás

1 botella de plástico (1,5 L o similar)
½ taza de azúcar
¼ taza de vinagre (blanco o de manzana)
½ taza de agua caliente
1 cucharadita de sal
Tijeras o cúter
Cuchara para revolver
Instrucciones de preparación

Cortar la botella
Con unas tijeras o un cúter, corta la botella de plástico aproximadamente un tercio de la parte superior. Así tendrás dos partes: la inferior será el recipiente, mientras que la superior (la del cuello) servirá de embudo.
Preparación de la mezcla
Vierte lo siguiente en la parte inferior del frasco
½ taza de azúcar
¼ taza de vinagre
½ taza de agua caliente
1 cucharadita de sal
Remueve bien hasta que el azúcar y la sal se hayan disuelto por completo. El vinagre y el azúcar atraerán a las moscas, mientras que la sal ralentizará el deterioro de la mezcla.

Completar la trampa
Coge la parte superior de la botella (la parte con el corcho, que habrás quitado) y dale la vuelta para que el cuello quede hacia abajo, formando un embudo. Las moscas se sentirán atraídas por el olor dulce, pero no podrán salir.
Colocación de
Coloque la trampa en un lugar donde haya notado la presencia de moscas: cerca de una cesta, en la cocina o en el exterior, cerca de fruta madura o un montón de compost. Sin embargo, evite colocarla demasiado cerca de donde come o cocina.
Otros consejos:

Para una mayor eficacia, sustituye la mezcla cada 4-5 días o cuando empiece a perder su atractivo.
Si quiere hacerla aún más atractiva, puede añadir a la mezcla un trozo de fruta madura o una cucharada de miel.
Asegúrate de que la trampa es estable para que no vuelque.
Hacer una trampa para moscas con una botella de plástico es una forma sencilla, barata y sostenible de controlar estas plagas. Con unos pocos ingredientes y un poco de habilidad manual, puedes hacer que tu casa o tu jardín estén más tranquilos y limpios, sin necesidad de productos químicos.