Seguramente ya se habrá dicho a sí mismo que limpiar los cristales de su casa es difícil y lleva mucho tiempo. Esto es aún más cierto cuando, una vez realizada la limpieza, el resultado no está en absoluto a la altura de tus expectativas y las antiestéticas rayas son aún más visibles.
Si esto te ocurre a menudo, no significa necesariamente que las estés limpiando mal, sino que necesitas el producto adecuado para que tus ventanas queden no sólo limpias, sino también impecables.
Aquí tienes los dos trucos de bricolaje más eficaces para limpiar cristales y espejos en casa sin dejar un desastre.
Primer consejo
Necesitarás
30 ml de vinagre de manzana
el zumo de un limón
Mezcla el vinagre de manzana y el zumo de limón, espera unos minutos y vierte la solución en un pulverizador.
Pulveriza la solución sobre el cristal o el espejo y límpialo bien con un paño de microfibra. Por último, seca con papel de periódico para evitar que se formen pelusas y manchas.
Segundo truco
Necesitarás
250 ml de agua
60 ml de vinagre blanco
3 gotas de detergente lavavajillas líquido
Vierte todos los ingredientes en una botella con pulverizador y agítala para mezclarlos bien.
Pulveriza la solución directamente sobre el cristal y frota bien con una esponja para eliminar cualquier resto de suciedad o grasa.
Por último, seca con un paño limpio o papel de periódico para que el cristal brille aún más.
Ahora que ya sabes cómo limpiar cristales y espejos sin dejar rayas, prueba a aplicar uno de los dos consejos descritos y te sorprenderán los resultados.