Si los radiadores no se calientan de manera uniforme, el problema puede deberse a la presencia de aire en las tuberías. La purga de los radiadores es una operación sencilla que puede realizar usted mismo, lo que mejora la eficiencia del calentamiento y evita las averías. No olvide comprobar la presión del agua después de purgar los radiadores.
Cuando los radiadores no se calientan de manera homogénenea, la causa puede no ser un simple mal funcionamiento, sino una acumulación de aire en el sistema. Afortunadamente, existe una solución sencilla y barata para resolver este problema.
¿Por qué los radiadores se calientan de manera desigual?
Si los radiadores no se calientan de manera uniforme, esto es debido a la presencia de aire en las tuberías. Impide que el agua caliente circule correctamente y calienta eficazmente el radiador. ¿Resultado? Una zona del radiador que permanece fría o menos caliente que el resto.
Cómo solucionar el problema: purgar los radiadores
La solución más rápida y sencilla para este problema es purgar los radiadores. Esto es fácil de hacer por ti mismo y solo toma unos minutos. Aquí tienes lo que necesitas:
Apagar la calefacción: asegúrese de que la calefacción esté apagada y los radiadores estén fríos.
Encuentre la válvula de purga: cada radiador tiene una válvula de purga en la parte superior. Utilice una llave de purga o un destornillador para abrir el grifo con cuidado.
Despeje el aire: oirá que se escapa aire. Asegúrese de que no haya agua que escape. Deje que el aire se escape completamente hasta que vea una pequeña gota de agua.
Cerrar la válvula: cuando el agua empiece a salir, significa que el aire ha sido evacuado completamente. Cerrar el grifo.
Comprobar la presión: después de purgar los radiadores, compruebe que la presión del agua en el sistema es correcta. Si es necesario, añada agua al sistema a través del grifo de llenado.
Las ventajas de purgar los radiadores
La purga regular de los radiadores no solo mejora la eficiencia del calentamiento, sino que también evita la sobrecarga del sistema, reduciendo así el riesgo de daños. Además, reduce el consumo de energía y ahorra en facturas.
Cuándo purgar los radiadores
Es aconsejable purgar los radiadores al menos una vez al año, preferiblemente al comienzo de la temporada invernal, para garantizar una calefacción óptima. Si observa que una pieza se calienta más lentamente que las demás o que el radiador tiene zonas frías, puede ser hora de purgarlo.