Las cacerolas incrustadas, cómo limpiarlas naturalmente: esto te tomará unos segundos

Las sartenes embebidas pueden convertirse en una verdadera pesadilla para cualquiera que tenga que limpiarlas, aquí está el truco para hacerlo en un instante y sin esfuerzo.

cacerolas incorporadas
Ha llegado el momento para todos nosotros en casa para hacer frente a las sartenes incrustadas que no hay manera de limpiar, sin mucho esfuerzo y esfuerzo . Sin embargo, no debemos desesperarnos,

Hay algunos trucos para limpiar las sartenes incrustadas en poco tiempo y con poco esfuerzo, incluso con productos naturales.

Sartenes con incrustaciones, cómo limpiarlas naturalmente
Limpiar el fondo de ollas quemadas o con incrustaciones o muy sucias es una tarea molesta para la mayoría de las personas.

Muchas veces para numerosos problemas tenemos la solución en casa y no sabemos cómo usarla. Por lo tanto, veamos qué es aconsejable hacer en estas ocasiones.

cacerola sucia
El uso de productos inapropiados o esponjas ásperas no es la mejor opción para eliminar los alimentos atrapados que no se pueden quitar con detergente normal.

Por lo tanto, antes de maltratar nuestras sartenes, es aconsejable probar algunos trucos caseros que dejarán las sartenes en perfecto estado en poco tiempo. < /span>

Bicarbonato de sodio y vinagre blanco.
Como en muchas otras ocasiones, estos dos productos se utilizan en numerosas ocasiones para tareas domésticas.

Para limpiar las sartenes horneadas se necesita 1⁄2 taza de vinagre blanco, una taza de agua y dos cucharadas de bicarbonato de sodio.

Veamos el procedimiento:

Primero se vierte vinagre blanco sobre la sartén con las cuajadas.
Continuar añadiendo agua hasta que hierva.
Luego apague el fuego debajo de la cacerola y agregue el bicarbonato de sodio.

Una vez que se haya iniciado el efecto efervescente, la suciedad se eliminará fácilmente.
Luego se debe frotar la sartén con la esponja y quitar los restos de comida quemada.

Por último, si quedan residuos, basta con frotar con bicarbonato de soda seco.

Bicarbonato de sodio y limón
El bicarbonato de sodio tiene un poder astringente que permite eliminar los restos de grasa y alimentos pegajosos que afectan a la superficie de las placas de cocción en cada uso. Pero incluso combinado con limón, elimina fácilmente los restos quemados.

Dos cucharadas de bicarbonato de sodio y medio limón son suficientes, pero veamos los pasos a seguir para limpiar una placa quemada con este remedio:

Primero, debes extender el bicarbonato de sodio sobre la placa de masa.
Luego, con medio limón, tendrás que frotar toda la superficie hasta que la sartén recupere su aspecto brillante original.
Si las manchas no desaparecen por completo, simplemente calienta el vinagre y repite la operación.

Sal y patatas
Inusual pero cierto, se puede tratar una sartén crujiente simplemente usando una patata y sal gruesa.

Se trata de ingredientes 100% naturales que, gracias a su consistencia, eliminan la adherencia sin dañar la superficie de las estufas.

Los ingredientes necesarios para este uso inusual de la patata son: una patata, un poco de sal gruesa y un poco de aceite de oliva.

Para empezar, hay que cortar la patata y lavar la sartén para eliminar lo más posible los restos pegados.

Espolvorear la sartén con sal gruesa y utilizar la patata cortada haciendo movimientos circulares durante unos minutos.

Después de esto, se debe eliminar todo residuo con agua. Por último, para proteger nuestra sartén limpia, tendremos que untarla con una cucharadita de aceite de oliva y guardarla como de costumbre.

Tampoco se recomienda utilizar ningún producto abrasivo en el interior de la sartén. En cuanto al fondo, no hay problema, ya que está diseñado para resistir altas temperaturas y por lo tanto a productos agresivos.

La pasta de dientes para limpiar las ollas entartradas
La pasta de dientes se usa en muchas ocasiones, ¡y no solo para cepillarse los dientes! Sirve para pulir la plata o limpiar la plancha, pero también para quitar algunas manchas de las alfombras.

Para limpiar las cacerolas entarimadas, basta con una pasta de dientes normal. Simplemente aplique un poco de pasta de dientes en el centro de la cacerola sucia y frote con una esponja de cocina. Coloque la cacerola bajo el grifo y quedará como nueva.