Cocinar en una placa vitrocerámica o de inducción es extremadamente agradable. Los ajustes de temperatura de cocción son extremadamente precisos y ajustables. Muchos hogares se han rendido a la idea, ¡aunque a veces estas placas son más caras! Por otro lado, la superficie es frágil y hay que protegerla de los arañazos. Por ello, la limpieza de las placas vitrocerámicas o de inducción en las cocinas equipadas con ellas no siempre es fácil. Es difícil saber cómo quitar las salpicaduras de aceite, un derrame de leche que has hervido demasiado en las cacerolas y las manchas de comida quemada. Aquí tienes nuestros consejos de abuela para limpiar y abrillantar tu placa de cocción de forma segura y sin dañarla. Sea cual sea el tipo de placa que tengas (de inducción o vitrocerámica), seguro que encuentras una solución eficaz para mantener tu cocina impecable.
¡Cuidado con el calor residual después de la cocción vitrocerámica! Podrías quemarte. Espera a que desaparezca el calor antes de limpiar la placa.
Contenido
1) Piedra arcillosa
piedra arcillosa casera
Captura de vídeo del canal de YouTube de Femme Actuelle
Empapa una esponja suave en piedra arcillosa y frota la vitrocerámica. Aclara con agua limpia y pasa un paño suave y húmedo. Este quitamanchas tan versátil y eficaz también puedes prepararlo tú mismo con productos básicos (arcilla, aceites esenciales, etc.). Sólo necesitas conocer las mejores recetas.
2) Jabón negro
Con una esponja húmeda, aplica un buen chorro de jabón negro líquido. Frota ligeramente, aclara y seca. Y ya que tienes el jabón negro a mano, úsalo para limpiar el suelo o la ropa. No le faltarán usos a este inigualable producto para la higiene y el hogar.
3) Blanc de Meudon
polvo limpiador bicarbonato blanc de Meudon
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Si su placa de cocción está muy sucia, el blanc de Meudon es la solución ideal para limpiarla. Mezcle una cucharadita de agua con 2 cucharaditas de blanco de Meudon. Con una esponja suave, aplica el producto sobre la placa de cocción y luego aclara bien. Esta poción desengrasará a fondo tu placa y la devolverá a la vida.
4) Bicarbonato sódico
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Poner en un bol dos vasos de bicarbonato de sodio y un vaso de agua. Mézclalos bien. A continuación, aplica la pasta resultante sobre la placa con una esponja. Dejar actuar durante veinte minutos. A continuación, retira la pasta de bicarbonato con una esponja húmeda. Ya está, ¡limpio!
5) Vinagre blanco
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Pon un poco de vinagre blanco en un pulverizador, rocía tu placa de cocción y luego límpiala con una esponja. Por último, pula con un paño suave. Tu electrodoméstico y tus placas de inducción y vitrocerámica quedarán como nuevos.
Consejos finales:
Muchos de estos consejos se pueden aplicar a los quemadores de las placas convencionales, a las ollas y sartenes o a las encimeras manchadas por los residuos de la cocina. Basta con pasar un paño de microfibra limpio. Y para la campana extractora, tendrás que hervir agua con jabón o bicarbonato, o pasarla por el lavavajillas. Así, la cocina y su entorno quedarán impecables.