Limpie su horno en unos pocos pasos. ¡Quedará como nuevo! ¡Sin necesidad de detergente!

Limpie su horno en unos pocos pasos. ¡Quedará como nuevo! ¡Sin necesidad de detergente!

Si quieres dejar tu horno superlimpio y ahorrar dinero, te recomiendo que leas los consejos de esta página.

Aquí descubrirás que no necesitas comprar el detergente habitual que ves en las estanterías de los supermercados, sino que puedes utilizar fácilmente ingredientes que ya tienes en casa. Así, tu horno estará más limpio que nunca.

Poner en práctica los consejos que te damos a continuación es un juego de niños. Sólo tienes que elegirlos en función de tus necesidades, porque cada uno de ellos será súper eficaz.

Limpia el horno en pocos pasos. ¡Quedará como nuevo! ¡Sin necesidad de detergente!
A menudo, para limpiar el horno y eliminar los malos olores y los restos de comida en el aparato, tendemos a utilizar un detergente muy caro que puede no ser tan eficaz como pensábamos.

Para evitarlo, puedes utilizar uno de los consejos que te damos a continuación. Utilizando uno de estos consejos, tu horno quedará muy limpio y al mismo tiempo no habrás hecho mella en tu cartera.

Método número uno: sal gorda y agua.
Un ingrediente disponible en su hogar que puede marcar la diferencia en la limpieza de su horno es la sal gruesa . Puede sonar extraño, pero la sal gruesa será un amigo inestimable a la hora de hacer el trabajo. Para utilizar este método para eliminar cualquier cal o residuo quemado, puede llenar una cacerola con una taza de agua y calentarla en la estufa. Cuando el agua esté caliente, añade 2 cucharadas de sal y remueve hasta que se disuelva por completo. A continuación, basta con aplicar la mezcla sobre las manchas y dejar actuar durante al menos 15 minutos. Por último, retíralas con un paño de microfibra húmedo.

Segundo método: vinagre y agua
En este caso, el truco es aún más sencillo. Tienes que coger un cazo y llenarlo de agua, después caliéntalo en el fuego. Cuando alcance el punto de ebullición, añade 1 vaso de vinagre y deja que la mezcla hierva. A continuación, coloca el cazo en el horno apagado y ciérralo para que el vapor de la mezcla pueda difundirse en el interior del aparato. Cuando la temperatura haya bajado lo suficiente como para meter las manos, simplemente limpia el horno con una esponja. El resultado será superbrillante.

Método tres: Limones y agua
Si prefieres utilizar limones, éste también es un remedio muy sencillo. Simplemente coge una fuente de horno y vierte en ella 1 vaso de agua y el zumo de 3 limones. A continuación, coloca la fuente en la parte inferior del horno y programa la temperatura a 150 grados durante 30 minutos. Una vez transcurrido el tiempo, limpia las paredes con una esponja. El resultado será impecable.

Llegados a este punto, sólo tienes que utilizar uno de estos métodos en función de los ingredientes que tengas en casa. ¡Te sorprenderán los resultados!

Disfruta de la limpieza.