Los calcetines de rizo, sobre todo los blancos, nunca pasan de moda. Siempre son los preferidos para un look deportivo pero informal.
Sin embargo, lo que todos sabemos a estas alturas es que tienden a ensuciarse rápidamente, dejando marcas oscuras que no desaparecen ni siquiera en la lavadora.
Para obtener resultados satisfactorios puede ser necesario tratarlas previamente, ¡por eso hoy te enseñamos cómo volver a dejarlas blancas sólo con remedios naturales!
Bicarbonato y limón
¡El primer remedio que te proponemos hoy es uno con bicarbonato de sodio y limón! Se trata de dos ingredientes muy buenos para blanquear la ropa.
Lo único que tienes que hacer es echar una cucharada dosificadora de bicarbonato de sodio y el zumo de un limón en un recipiente con agua caliente.
Verás que combinados iniciarán inmediatamente una reacción efervescente, creando una especie de «espuma».
Llegados a este punto, déjalo toda la noche y lávalo con normalidad al día siguiente.
El bicarbonato eliminará a fondo los calcetines junto con el limón, que también eliminará todos los malos olores.
Percarbonato sódico
El percarbonato sódico es a todos los efectos un blanqueante natural. De hecho, se utiliza contra las manchas resistentes, como las negras bajo los pies.
Añada dos cucharadas de percarbonato sódico a un recipiente lleno de agua muy caliente. Lo mejor es hervirla. Por supuesto, recuerda siempre tener mucho cuidado de no escaldarte.
Déjelos en remojo durante al menos 3 horas. Si es posible, déjalos toda la noche para conseguir un efecto aún más chispeante.
Se trata, pues, de un método muy útil porque nos permite blanquear la ropa ¡sin lejía!
Método de la olla
¿Recuerdas el antiguo método de la olla? Nuestras abuelas lo utilizaban para dejar los calcetines como nuevos.
Basta con llenar una olla mediana con agua. A continuación, añade 2 limones cortados en rodajas y los calcetines que quieras limpiar.
Ponlo al fuego y llévalo a ebullición. El limón junto con la alta temperatura sólo blanquearán suavemente los calcetines.
Pasado este tiempo, déjalos en remojo durante 3-4 horas. Después, puedes proceder al lavado.
Vinagre de vino blanco
El vinagre de vino blanco, como sabes, se presta a muchos usos diferentes. De hecho, además de eliminar la mancha de tus calcetines, también los hará más suaves, lo que lo convierte en un auténtico suavizante.
Así que diluye una taza de vinagre de vino blanco en un litro de agua en un barreño.
Y déjalos en remojo durante 30-40 minutos. Después, empieza a frotar suavemente con unos copos de jabón de Marsella.
Si el halo persiste, puede que tengas que repetir la operación. En cualquier caso, deja actuar durante 10 minutos y aclara a fondo para eliminar todos los restos.
Tus calcetines quedarán suaves, perfumados y, sobre todo, ¡muy blancos!
Advertencias
Recuerda siempre utilizar guantes durante los remedios indicados.
Y recuerda también tomar las debidas precauciones con las altas temperaturas, para no quemarte.
